Cómo cambiar el mundo.
Alguna vez te has preguntado, ¿cómo cambiar el mundo? Que tremenda pregunta, ¿verdad?
Pero que pertinente justo ahora que parece las cosas no van como quisiéramos.
Si alguna vez te lo has preguntado o te lo estas preguntando ahora, créeme que ya estas siendo parte de la respuesta. Porque existe dentro de ti un anhelo pidiendo que eso ocurra y este es en sí mismo la semilla o el pensamiento promotor que lo hará posible.
Desde mi perspectiva la respuesta parece un poco obvia y hasta un poco infantil: el mundo cambiará cuando todos cambiemos. Cuando existan un número suficiente de personas que hayan transformado su actitud y comportamiento de tal forma que sea imposible que alguien se resista al cambio.
¿Cambiar? ¿Hacia dónde y cómo? Hacia la unidad, la integración y el equilibrio. Pero, qué unir, qué integrar o qué equilibrar. A ti con el todo, entender que tu persona hace parte de un conjunto mayor llamado humanidad, y que como parte de ese gran conjunto cada cambio que emitas en ti tendrá un impacto “sutil” en todo lo demás. Cada vez que elijas el amor y la compasión en tus acciones, estarás llevando alivio a otros, que cada vez que vibres alto y tu luz llene toda una habitación estarás iluminando las sombras de dolor y de la violencia.
Integrar la energía femenina y masculina, que son dos aspectos de la divinidad y no tratarlos como antagonistas, extinguir la lucha, la dominación y la competencia, y tomar lo mejor de esos dos universos, la cultura del cuidado que se encarna en rasgos maternales, la compasión, el amor y la belleza con la fuerza, la racionalidad y el poder; e iniciar una danza, un fluir que de origen al mundo que queremos.
Finalmente, equilibrar quién eres con quien quieres ser, y actuar en coherencia, da lo que quieres recibir, sirve si quieres ser servido, sé justo si quieres justicia y trata a los demás como te gustaría ser tratado. Es decir, “sé el cambio que quieres ver en el mundo” como nos propuso Gandhi en esta frase.
Por donde iniciamos este cambio: por ti desde el adentro.
Por la decisión que tomes hoy sobre quien quieres ser. Y cuando hayas elegido, usa los medios necesarios para lograrlo, estos podrán aparecer como un curso, un seminario, un taller, un libro, una reflexión o cualquier otro medio que te recuerde tu esencia divina, te ayuden a crecer, te conecte con la fuente de la alegría y de la paz.
Deja de alimentarte con negatividad, apaga los sonidos, noticias, programas y publicaciones que te agobian, aléjate de los focos de quejas, así estos sean personas; deja de rechazar las realidades que ves y empieza a comprender que tu rechazo solo hace que persistan, envía bendiciones y buenos pensamientos. Que diferencia haríamos, si en vez de decir: ¡ODIO LA GUERRA! Decimos: espero llegue pronto la paz.
Ahora bien, tal vez no veas el cambio hoy, pero habrás dado el primer paso.
Por Katherine Escobar
Host Programa radial “Buena Vibra con Katherine” en MotivaRadio.net
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