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ALIMENTACION EN EL TEA (Trastorno Espectro Autista)

ALIMENTACION EN EL TEA (Trastorno Espectro Autista)

Cuando mi hijo fue diagnosticado con autismo, una de las recomendaciones del médico especialista fue cambiar su alimentación para ayudar a mejorar su condición.

Llevar una alimentación libre de gluten, caseína y soya es muy recomendado para quienes se encuentran dentro del Trastorno de Espectro Autista (síndrome de Asperger, autismo, trastorno generalizado  del desarrollo no especificado y trastorno desintegrativo infantil) ya que estudios han demostrado que este cambio interfiere de una manera muy efectiva en el organismo. Los síntomas mejoran, así como también la capacidad de funcionar en sociedad.

Fueron muchas las preguntas que surgieron en mi mente cuando leí en las indicaciones del médico “llevar una dieta libre de gluten y caseína”.

Les resumo la información básica para iniciarnos en el tema.

El gluten es una proteína presente en el trigo, la cebada, el centeno, triticale (híbrido de trigo y centeno), espelta, semolina.

La caseína es una proteína que se encuentra en la leche de origen animal y en sus derivados. Ambos, causan sensaciones similares a la adición a un opiáceo  (efecto caseomorfina y glutemorfina), lo cual altera los cinco sentidos. De ahí la importancia de rerarlos del organismo.

Para iniciar la alimentación libre de gluten y caseína, debemos saber cuáles son los alimentos permitidos, los alimentos y químicos dañinos (también llamados prohibidos), las  fuentes ocultas de gluten y caseína. También debemos iniciar el hábito de leer la etiqueta del producto que vamos a consumir (incluyendo los medicamentos), porque a veces en los ingredientes pueden haber “derivados lácteos”, soya o algún otro componente que es considerado dañino para quienes estamos dentro del TEA (trastorno espectro autista). Si estos aditivos están en la etiqueta del producto por favor exclúyalos, SON DAÑINOS y debemos eliminarlos de la ingesta: malta, maltodextrina, glutamato monosódico, almidón modificado, almidón vegetal (trigo), colores y sabores artificiales, aspartame, nutrasweet, BHA, BHT, cafeína, nitratos, nitritos, glutamato monosódico, ácido fosfórico, bromato de potasio, quinina, polisorbato 60/80, sulfitos, vanillin, TBHQ, sacarina, propylen glycol, sodium lauryl sulfate, Sodium laureth sulfate, benzoato de sodio, estearato de magnesio.

También debemos reducir el consumo de azúcar, asi que endulzaremos con stevia, xilitol, miel de abejas, jarabe de agave o de maple.

Muchas veces nos preguntamos: ¿Por qué se excluyen el gluten y la caseína?

Pues bien, la caseína de la leche y el gluten de los cereales producen péptidos opioides, los cuales producen un efecto analgésico o de adormecimiento en el sistema nervioso central. Por lo tanto, debemos eliminarlos para lograr mayor funcionamiento cognitivo.

Al saber que algo tan común como una simple golosina podía hacerle daño a mi hijo, supe lo importante  de informar, involucrar, y crear consciencia en quienes lo rodeaban. Fue ahí cuando vi la imWportancia de conversar con los familiares, maestros y allegados. Insistí: “un poquito nada más va a hacerle mucho daño.”

A donde mi hijo tuviera que ir (la escuela, una celebración o a compartir con las amistades o familiares), siempre llevaba su comida y las golosinas permitidas. Fue la mejor manera que encontré de estar segura que estaba consumiendo lo indicado por su médico.

¿Cómo vamos a cocinar ahora?

Al momento de cocinar vamos a sustituir las harinas de gluten por: harinas de maíz, garbanzo, lentejas, castañas, quinoa, almendras, nueces, coco, amaranto, fécula de tapioca o de papas.

La leche de origen animal la podemos reemplazar por la rica y nutriente leche de almendras, coco, ajonjolí o nueces.

¿Por cuánto tiempo debemos alimentarnos así?

Los especialistas recomiendan que sea por lo menos por dos años. Recuerde  que  cada cuerpo es único y reacciona a su propio ritmo.

Puedo decirles que noté cómo los síntomas mejoraban al poco tiempo de cambiar la alimentación. Realmente vale la pena intentar hacer esta recomendación de los profesionales de la salud; es fácil y no invasiva. Muchos la llaman dieta, para mi es un estilo o tipo de alimentación.

Nosotros  nos acostumbramos tanto a alimentarnos de esta manera, que pasamos 10 años estrictos sin salirnos de las indicaciones y actualmente somos un poco flexibles en ciertas comidas. Hoy en día a mi hijo no le agradan los lácteos de origen animal, tal vez porque nunca los vio en casa, ni los consumió; además, él está consciente de que no aportan ningún beneficio a su salud.

Al poco tiempo de estar alimentándonos de esta manera, mejoró la condición del intestino y como consecuencia inmediata empezó el contacto visual, disminuyeron las actitudes auto-estimulativas, la hiperactividad, el trastorno del sueño,  la conducta mejoró  y empezó a hablar.

¿Cuáles son los cuidados que debemos tener  al procesar los alimentos?

Cuando vamos a procesar los alimentos en casa debemos tomar muchas precauciones.

Lo más recomendado es eliminar  por completo el gluten de nuestra cocina para evitar la contaminación cruzada directa o indirecta. Sé que esto suena muy radical porque el cambio alimenticio va dirigido sólo a quien está dentro del TEA (trastorno espectro autista) y quizás puedan considerar como injusto que todos en casa deban seguir estas indicaciones. Pensemos en los riesgos y tomemos decisiones en unión familiar.

La contaminación cruzada directa ocurre cuando un alimento libre de gluten entra en contacto con un alimento que sí contiene gluten. Y la contaminación cruzada indirecta se produce al usar los mismos utensilios de la cocina para ambos tipos de alimentos.  Por ejemplo, si estamos preparando un arroz y usamos un tenedor con el que acabamos de mezclar la pasta de trigo, vamos a contaminar el arroz. 

Esto de evitar la contaminación cruzada me resultó un poco complicado, preferí evitar el riesgo. Por eso decidí eliminar las harinas de gluten de mi cocina. Cambié los recipientes, tablas de picar, envases para medir, cacerolas, etc. Convertí mi cocina en un espacio totalmente libre de gluten.

Si usted opta por mantener el gluten en su cocina, le sugiero que evite la contaminación cruzada. Recuerde que es por la salud de su ser querido.

Estos aditivos están permitidos dentro de nuestra alimentación:

Acido adípico, sal de amonio, ácido ascórbico, ácido acético, ácido cítrico, beta caroteno, ascorbato de calcio, carbonatos, celulosa, EDTA, celulosa, tocoferoles, clorofila, lecitina, pectina, curcumina, goma xantam, goma guar, goma arábiga, psyllium, agar agar, arowroot.

La gran pregunta que todos nos hacemos:

¿Y ahora qué vamos a comer?

La verdad es que la lista es larga. Los alimentos permitidos son las frutas, raíces (papa, zanahoria, tapioca, etc.), vegetales, frutos secos, huevos, carnes, arroz, frijoles, lentejas, garbanzos, pescados (preferiblemente de cultivos) y las especies naturales. Excluiremos sólo el brócoli, coliflor, repollo y manzanas, por su contenido de fenoles (tipo de alcoholes).

Mientras estemos haciendo estos cambios alimenticios, procure mantener una actitud creativa y positiva. Recuerde, ésto es por la salud de su ser amado.

Por último, le recomiendo consultar con un especialista en nutrición, ya que todo es mejor en manos de un profesional.

Sigamos adelante

con mucho AMOR,

FE EN DIOS,

CONSTANCIA Y

DEDICACION.

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